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jueves, 10 de abril de 2008

La vida es una puta mierda

La vida es una puta mierda, y lo sabes. Si no es así es porque estás cegado por algún efímero período de falsa felicidad pasajera, porque eres un cínico o porque eres un imbécil descerebrado y tu limitación intelectual te impide alcanzar a comprender la realidad.

No eres más que una mierda de grano en la inmensidad del cosmos, un minúsculo pedazo de bazofia cuyo destino no está regido por la mano de ningún dios misericordioso ni omnipotente, ni por los designios de algún ser superior creador. Ni siquiera tienes destino.

Tu patética existencia tocará a su fin en el momento menos pensado. Quizás seas aplastado de forma fulminante por el cruel engranaje del universo, que gira y se mueve irrevocablemente.

- Huy, perdona, es que estorbabas-.

Nadie se disculpará. Ya no existes. Que más da.

Si tienes suerte morirás decrépito y marchitado por la edad, bañado en tus propios efluvios que no pudiste controlar y rodeado por trozos de carne corrompidos a partir de un fragmentos de tu ADN.

Igual la suerte te sonríe y un día cualquiera al cruzar la calle un desgraciado malnacido que no merece ni el oxígeno que ha gastado en los años que ha estado infectando al mundo con su presencia, borracho y al volante de su coche, te hace un favor y termina con toda esta farsa.

También puedes hacerlo tú, pero eso ya depende de ti.